Son muchas las familias que se han visto en la necesidad de convertir el hogar en un espacio para aprender. Esta es una tarea poco fácil, sobre todo en familias numerosas y con espacios reducidos.
¿No hay motivación? ¿Hay distracciones que impiden la concentración? A continuación te presentamos algunos aspectos que puedes considerar para un espacio de estudio adecuado.
1. Espacio
Definir un espacio que sea de preferencia utilizado únicamente para recibir clases, con esto creas estructura.
2. Decoración
Mientras más simple sea la decoración, más fácil será para tus hijos concentrarse.
Pensar en la altura de la vista de los niños, adaptando así el espacio de estudio a ellos.
3. Material de apoyo
Ten a la mano material que pueda llamar la atención de tus hijos y con el cual puedas reforzarles conocimientos que vayan adquiriendo.
Cubetas educativas: Estimulan el desarrollo de la motricidad fina, el pensamiento crítico y el lenguaje a través de destrezas con las cuales se puede jugar también.
Libros: Son un excelente material de apoyo que les ayuda a desarrollar la lectura, comprensión, lenguaje y escritura.
Material didáctico de apoyo: Utiliza flash cards, posters, mapas o cualquier material educativo que te sirva de apoyo para hacer visible y a la vez tangible los conceptos que se están enseñando. A través de ellos estimulas la memoria y el reconocimiento de cualquier concepto.
Encuentra este artículo con más opciones de material de apoyo en la sexta edición de Kiddies Magazine.
